domingo, 25 de enero de 2015

Soledad




¡Qué terrible la Soledad!, me acecha en cada esquina de la vida,
allá por dónde yo vaya siempre sale a mi paso la muy bandida, y me persigue, me pisa los talones…
Mira que yo intento evitarla, intento correr, refugiarme, cobijarme en la pensión del amor, pero antes de que me abran las puertas, tengo que salir corriendo, porque me alcanza.
Es cómplice de mis sueños, mi maldita compañera de cama; cada noche muero un poco cuando se cuela entre mis sábanas…
A veces, me vacía un poquito por dentro y me hace llorar hasta quedarme dormida, otras veces me hace preguntarme cosas estúpidas y vuelvo a llorar.
Maldita Soledad, amante del tiempo, me haces llorar y luego me dices que me quieres…
Yo no te pido nada, tan sólo que me dejes unos años de ventaja, que ya tendremos tiempo de estar juntas, pero por el momento , deja de atormentarme, deja que por un tiempo sean otros los brazos que me acunen cada noche antes de irme a dormir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu huella aquí!