No me dejes sola tan sólo un segundo,
quédate a mi lado en ésta noche oscura
que me abraza y me atenaza en medio de ésta soledad.
Soledad inmunda que me haces presa del pánico:
no vengas, no te he llamado, tan sólo quiero
que venga él, y que se quede ésta noche junto a mí,
que se quede a mi lado.
No te alejes un sólo milímetro
porque entonces se llenará de aire ese hueco
y me congelará hasta el alma,
llenará de frío mis huesos, congelará mi ser entero.
No te vayas siquiera un día,
porque cada minuto se hará eterno, porque tal vez,
sin darme cuenta, me muera mientras te espero.
Quédate a mi lado ésta noche, sé mi sombra en
la oscuridad de ésta fría noche y no dejes que la soledad
se adueñe de mí, no la dejes, no, que viene a por mí,
no quiere verme feliz, no quiere verme junto a tí.
Quédate por favor, no te vayas, quédate conmigo, amor…
Texto escrito en el año 2001.
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